El ALUcinante peligro del Aceite Lubricante Usado (ALU)

Como recolectores de Aceite Lubricante Usado, AYCO Aceites y Combustibles es un eslabón de la extensa cadena que es el Re-Refinamiento de lubricantes. Temas como estos ya los veremos en futuras entradas; sin embargo, existe una interrogante que debemos atender antes de llegar a estos temas más complejos:

¿Por qué el Aceite Lubricante Usado?

Los lectores podrán tener interrogantes de esta índole en cuanto al Aceite Lubricante Usado, de ahora en adelante referido como ALU, que son perfectamente razonables. Es necesario levantar estos cuestionamientos, ya que las respuestas a estos mismos servirán como ALUmbrado de la importancia del manejo de estos productos químicos e industriales. Así que, queridos ALUmnos, acompáñennos en esta gira sobre el ALU, y sus impactos a la salud humana y el medio ambiente

1] Aceites

El término Aceite es uno considerablemente amplio; todos sabrán que hay una gran variedad de aceites, cada uno con distintos usos. La Real Academia Española define los aceites como líquidos grasos, densos y viscosos que se pueden obtener de frutos, semillas, animales, minerales o de manera sintética. Dicho de otra manera, el aceite es una sustancia líquida insoluble en agua, cuyo origen puede ser natural o sintético. Aunque existan numerosos tipos de aceite, la mayoría comparten las mismas propiedades:

Figura 1. Propiedades del Aceite


2] Tipos de Aceites

Como ya hemos visto, el aceite puede venir de múltiples orígenes:

  • Puede extraerse de frutos, vegetales o semillas (Ej. Aceitunas, almendras, coco, aguacate, etc.)

  • Puede provenir de ciertos animales (Ej. Ballena, foca, bacalao, etc.)

  • Puede encontrarse de forma natural (Ej. Petróleo, minerales, hulla, etc.)

  • Puede crearse de manera sintética

Aceite según su uso

Lógicamente, las características del aceite son determinadas, en gran medida, por su origen. No vamos a creer que el aceite que se extrae de una almendra será igual al que se produce mediante el refinamiento del petróleo. Esta diferencia en propiedades permite clasificar los aceites según su uso:

Comparativo de Aceites Industriales con otros aceites

3] Aceites Industriales

Como el lector seguramente podrá apreciar, no todos los aceites son hechos iguales, ni tienen las mismas aplicaciones. Aquí es donde comenzamos a ahondar en los Aceites Industriales, que incluyen los ALU, ya que estos son los aceites más peligrosos, tóxicos y contaminantes, seguidos por los aceites energéticos. ¿Cómo lo sabemos?


Así como hay varios tipos de aceites, hay varios tipos de aceites industriales. Cada uno ha de empeñar su función específica; sin embargo, una gran parte de ellos responde a la misma necesidad: lubricar.

4] Aceites Lubricantes

El Instituto Americano de Petróleo define los lubricantes como productos capaces de reducir fricción, adhesión, calor, desgaste o corrosión al ser aplicado en una superficie o introducido entre dos superficies en un movimiento relativo, o que es capaz de trasmitir poder mecánico. Estas características son indispensables para las industrias y los operadores de maquinaria, ya que, generalmente, los trabajos realizados implican el choque o roce de piezas metálicas a rápidas velocidades por períodos de tiempo extendidos. 

De manera superficial, los aceites lubricantes se producen mediante el refinamiento del petróleo u otros minerales, y la incorporación de varios aditivos químicos que alteran sus propiedades. Dicho de otra manera, el petróleo se extrae del subsuelo y pasa por varios procesos de refinamiento, que eliminan impurezas y elementos no deseados de la sustancia, para obtener un aceite base. A este aceite base se le agregan ciertos aditivos, como dispersantes, detergentes, modificadores de viscosidad, y otros, para que el aceite final tenga las propiedades deseadas. Hay mucha más información sobre el tema, pero esto será abordado en una futura entrada del blog. Por ahora, nos quedaremos en que es así como se elaboran los aceites lubricantes, a los cuales los lectores y nosotros tenemos acceso inmediato. ¡Sí, así es! Todos tenemos acceso al aceite lubricante, ya que este se utiliza en los vehículos y automóviles para proteger el motor, entre otras funciones. 

5] Aceites Lubricantes Usados (ALU)

Con todo el conocimiento que hemos adquirido hasta ahora, podemos responder varias preguntas relacionadas con el trabajo en AYCO: 

¿Por qué el Aceite?

Pues ahora sabemos que el aceite es una sustancia viscosa, que no se disuelve en agua, es muy persistente, y que tiene varios orígenes, sean naturales o sintéticos. Estas propiedades resultan en su peligrosidad intrínseca, ya que su persistencia e hidrofobicidad significan que puede transportarse en el agua o infiltrarse en la tierra, y su viscosidad asegura que se adhiera a la flora y la fauna, exponiéndolos a su composición química. Por lo tanto, el aceite es una sustancia de interés, que debe ser gestionada apropiadamente para evitar serios problemas.

¿Por qué el Aceite Industrial?

Como hemos discutido anteriormente, el aceite industrial es el más peligroso y tóxico de los aceites, ya que su composición química, caracterizada por el refinamiento del petróleo más la incorporación de múltiples aditivos químicos aumenta considerablemente su toxicidad. Mientras que otros aceites se utilizan para freír papas o rejuvenecer la piel, los aceites industriales se utilizan para reducir la fricción, el calor y desgaste en piezas metálicas que se desempeñan en operaciones intensas a velocidades elevadas por tiempos extendidos. 

Y la pregunta del millón:

¿Por qué el Aceite Lubricante Usado?

Seguramente los lectores sabrán que el aceite de cocina no se puede usar para siempre. Al utilizar el aceite de cocina en la cocción de alimentos, este se degrada, volviéndose peligroso para el consumo y alterando el sabor de los alimentos. Una publicación de Fedepalma revela que, al ser expuestos al aire y a elevadas temperaturas, ocurren reacciones químicas complejas que dan lugar a nuevos componentes químicos en el aceite, algunos relacionados con cáncer u otras enfermedades crónicas. Al reutilizar el aceite de cocina, aumenta su estado de oxidación, resultando en su degradación y la aparición de químicos peligrosos. 

Ahora, si esto sucede con su aceite de cocina favorito, imaginen lo que puede suceder a los aceites lubricantes. En sus raíces, les sucede lo mismo. El aceite de motor está en constante circulación del motor, lubricando cada rincón que pueda, reduciendo la fricción entre las piezas, y manteniendo la temperatura estable por medio de la transferencia de calor. Aunque más estable y resistente que el aceite de cocina, el aceite de motor también comienza a degradarse. Las temperaturas elevadas junto con el oxígeno y/o humedad aceleran su oxidación, lo cual aumenta su viscosidad. Adicionalmente, se van consumiendo los aditivos agregados, y se incorporan fragmentos microscópicos del motor, que incluyen metales pesados y otros elementos tóxicos. Esto sin mencionar posibles deficiencias del vehículo en particular, como una entrada de agua, la mezcla del combustible con el aceite, etc. Como resultado, se obtiene el ALU, un aceite lubricante, oxidado, muy viscoso, lleno de metales pesados, elementos tóxicos, hollín, cenizas y cualquier otro subproducto de las explosiones en el motor. En todo sentido de la expresión, una amenaza para la sALUd. Una amenaza que, lastimosamente, un gran porcentaje de la población no ve, echando el aceite usado de su vehículo en el suelo, en un cuerpo de agua o en algún alcantarillado cercano. 

Conclusión

Entonces, queridos ALUmnos, ¿por qué el ALU? Porque es una sustancia de carácter industrial, sumamente abundante, accesible a toda la población, que contiene metales pesados como el plomo, mercurio, zinc y cromo, entre otros compuestos químicos, que es sumamente persistente, se adhiere a superficies y animales, puede flotar y transportarse en el agua, infiltrarse por el suelo en las aguas subterráneas, cuya interacción con el ser humano puede causar efectos agudos, crónicos, neurológicos y cancerígenos, entre otros, y que pasa completamente desapercibida por la mayoría de la población.  

Nada de esto debe ser entendido o interpretado como que el aceite es malo. El aceite es una sustancia maravillosa, que ha permitido a la humanidad alcanzar enormes hitos y logros, que se ha vuelto parte de nuestra vida cotidiana. El mensaje es que el aceite, como todo otro producto, debe manejarse con prudencia, cautela y responsabilidad, por la seguridad de los operadores, trabajadores y personal, la población en general, la flora y la fauna. AYCO se enorgullece de ser parte del proceso que gestiona apropiadamente el ALU, y esperamos que ustedes puedan formar parte de este proceso también.

¡Hasta la próxima, ALUmnos!